Ada's Cafe, que se enfoca en "elevar" a las personas con discapacidades, se ha convertido en un elemento básico del vecindario en el norte de California con un total de 50 empleados, todos los cuales viven con "una variedad de desafíos". Pero como muchas empresas, estaban luchando por mantenerse a flote debido al Covid-19. Ahora, gracias a un residente que se inspiró para ayudar, la comunidad de Palo Alto se está uniendo detrás del amado café, con una autorización en línea para ayudarlos a permanecer abiertos, porque "no hay una fuente de bondad más grande en mi ciudad que Ada's Cafe."
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